Todas las actividades que realizamos necesitan de energía que conseguimos a través de la comida. Pero conseguir alimento no siempre fue fácil. En el pasado, los alimentos eran tan valiosos que eran utilizados como moneda (siendo altamente valorados en los trueques) para adquirir otros bienes. Sin la tecnología agrícola y de transporte que hoy gozamos, cualquier mala cosecha podía convertirse en una hambruna.